MADRID. EL CONSEJO DIOCESANO PIDE A LOS POLITICOS CATOLICOS QUE RECHACEN CUALQUIER PROYECTO EN FAVOR DEL ATRIMONIO HOMOSEXUAL

MADRID
SERVIMEDIA

El Consejo Diocesano de Laicos de la Archidiócesis de Madrid recordó hoy a los políticos católicos que "están obligados" a oponerse al matrimonio entre homosexuales y a votar en contra de cualquier proyecto de ley en favor de estas uniones.

"Los parlamentarios católicos tienen el deber moral de expresar clara y públicamente su desacuerdo y votar en contra de proyectos de ley que sean a favor de dichas uniones", señala ese Consejo en una nota difunida hoy.

El Consejo Diocesano de Laicos de Madrid aclara en la nota que esa petición se encuentra recogida en el documento recientemente publicado por la Congregación para la Doctrina de la Fe, titulado "Consideraciones acerca de los proyectos de reconocimiento legal de las uniones entre personas homosexuales".

En este sentido, este consejo destaca que se adhieren a ese documento y animan a los cristianos laicos de la Diócesis de Madrid a estudiarlo y ponerle en práctica.

La nota señala que l Consejo Diocesano de Laicos "ha defendido siempre a la familia, institución natural creada por Dios y basada en la unión matrimonial de un hombre y una mujer, como una realidad distinta de la relación que pueda existir entre personas del mismo sexo, donde las características de complementariedad, diferenciación y capacidad para transmitir nuevas vidas -propias de la naturaleza misma de la institución del matrimonio- brillan por su ausencia. Igualmente defendemos el respeto y la acogida que merecen las pesonas homosexuales".

Este Consejo también recuerda el documento de la Congregación para la Doctrina de la Fe cuando afirma que "el matrimonio, en realidad, existe únicamente entre dos personas de sexo opuesto, que por medio de la recíproca donación personal, propia y exclusiva de ellos, tiende a la comunión de sus personas. Así se perfeccionan mutuamente para colaborar con Dios en la generación y educación de nuevas vidas".

"Es lógico, pues", añade, "que realidades que no son susceptibles de equiaración, distintas y distantes, exijan tratamientos jurídicos perfectamente diferenciados.

El documento indica tambíen que "el respeto y la acogida de las personas homosexuales e incluso el reconocimiento de determinados beneficios sociales no tienen que conducir necesariamente a la equiparación jurídica con la institución matrimonial. Ya que al margen de otras consideraciones, simplemente desde el orden natural, son realidades distintas y por tanto no pueden tener el mismo tratamiento".

El textoprosigue señalando que, "consecuentemente, consideramos necesario abstenerse de cualquier tipo de cooperación formal a la promulgación o aplicación de leyes tan gravemente injustas como las que promueven el reconocimiento legal de las uniones homosexuales equiparándolas con el matrimonio".

En su nota, el Consejo Diocesano de Laicos señala que, "claramente, sin ambages, y como se recoge en el documento citado, recordamos a los políticos católicos que están obligados a oponerse a tales disposiciones". "Como conclusión", indica este consejo, "reconocer legalmente las uniones homosexuales equiparándolas al matrimonio, significaría, no solamente aprobar un comportamiento no conforme a la naturaleza de la persona y convertirlo en un modelo para la sociedad actual, sino también ofuscar valores fundamentales que pertenecen al patrimonio de la Humanidad".

El Consejo Diocesano de Laicos de Madrid, que goza de autonomía en el ejercicio de sus actividades de acuerdo con sus Estatutos, agrupa a más de 200 ovimientos y asociaciones católicas.

(SERVIMEDIA)
01 Dic 2003
J