Tras destacar que los "graffitis" causan unos gastos anuales a los ayuntamientos de la región de unos 2.000 millones de pesetas, Luis Partida indicó que "las pintadas afean y degradan el paisaje urbano, a la vez que constituyen un considerable deterioro del patrimonio arquitectónico y monumental de muchos de nuestros pueblos y ciudades y transmiten una sesación de suciedad".

Por su parte, Carlos Mayor explicó que las pintadas "suelen ser hechas por jóvenes alentados por una rebeldía malentendida, que ignoran el daño medioambiental que producen y el hecho de que el espacio público pertenece a todos y a ellos mismos".

"Las pintadas no pintan nada" será el lema de la campaña de concienciación, básicamente audiovisual, que se prolongará durante todo el mes de mayo y que culminará con un concurso escolar dirigido a los niños -los jóvenes del futuro- cn el nombre "Imagina tu ciudad sin pintadas".