En declaraciones a Servimedia, Novillo aseguró que el asunto de las falsificaciones de firmas se debe a la falta de plantilla de la Policía Municipal, que se ha visto reducida desde que el PP accedió al gobierno municipal, en 1989.

Para Novillo, el Ayuntamiento de Madrid no puede eludir su responsabilidad en el caso, alegando que en la época del PSOE ocurría lo mismo y limitándose a culpar a la Policía Municipa, de la que dijo que desde que saltó el escándalo ha visto mermada su autoridad en el asfalto.

En este sentido, criticó al Ayuntamiento de Madrid por "mirar el pasado para ver lo que hacían los otros (el PSOE)", en lugar de preocuparse por depurar responsabilidades en el caso y mejorar la organización de la Policía Municipal.