El sindicato asegura que este vertido corresponde a los lixiviados que normalmente se generan en los depósitos de residuos y que legalmente han de recogerse en una balsa especial, de la cual pueda extraerse su contenido para recibir un tratamiento coo residuo tóxico y peligroso.

"Sin embargo", asegura CCOO en la nota, "en esta planta son bombeados directamente, con nocturnidad y alevosía, desde la balsa a los terrenos adyacentes, con la consiguiente contaminación del suelo y subsuelo de la zona".

La central sindical anuncia en el comunicado que en los próximos días estudiará también las responsabilidades que el Ayuntamiento de Madrid pudiera tener en estos hechos, por falta de control.