Esta es una de las conclusiones del informe "Aproximación sociolaboral al empleo protegido: Los Centros Especiales de Empleo", presentado hoy en Madrid por el secretario general de CCOO de Madrid, Javier López, y la secretaria de Política Social de este sindicato, Pilar Morales.

El informe recuerda que en la Comunidad de Madrid existe registrados 109 centros especiales de empleo en los que trabajan 4.203 trabajadores discapacitados. De ellos, el 65,41% poseen contratos indefinidos, frente al 34,59% que se encuentran con contratos de carácter temporal.

CCOO de Madrid reconoce que, de no existir estos centros de empleo para personas con minusvalías, habría muchos discapacitados que estarían fuera del mercado de trabajo, elevando aún más las tasas de paro de este colectivo, actualmente el 29,6% en la Comunidad de Madrid.

De acuedo con este informe, los centros especiales de empleo deberían ser el paso previo a la consecución de un trabajo normalizado, pero en la realidad, según CCOO, se produce un estancamiento de los trabajadores en estos centros.

Según explicó Javier López, "se está produciendo un cambio positivo en la incorporación al mercado laboral de los trabajadores discapacitados, si bien todavía queda mucho por hacer para conseguir la plena integración".

En este sentido, apuntó que se ha pedido, tanto al Ejecutvo regional como al Gobierno, la puesta en marcha de planes de empleo de integración para los colectivos más desfavorecidos "para lograr que estas personas se sientan de verdad integrados en la sociedad".

Por su parte, la secretaria de Política Social de CCOO de Madrid, Pilar Morales, explicó que los centros especiales de empleo se están convirtiendo "en auténticos guetos" que no dejan desarrollarse como trabajadores a las personas con minusvalías.

"Estos centros de trabajo deberían ir desaparecindo con el tiempo, eso querría decir que estas personas habrían encontrado trabajo y por tanto se habrían integrado con normalidad", subrayó Morales.

Finalmente, ambos sindicalistas coincidieron en la necesidad de que estos centros se conviertan en un paso intermedio que posibilite que los discapacitados se familiaricen con el mundo del trabajo para, posteriormente desarrollar su labor con normalidad.