A cambio, la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes aprobará el Plan de Actuación Urbanística (PAU) de Vallecas, en el que el ayuntamiento prevé la construcción de 20.975 viviendas, de las que 1.080 serán de protección oficial y 8.430 libres.

La polémica consistía en que la M-45 debe atravesar en sus dos primeros kilómetros el nuevo PAU y el ayuntamiento se resistía a que el coste de estos dos kilómetros, unos 2.000 millones, se incluyera en el presuuesto del PAU. La comunidad lo justificaba en que, si no se construye la M-45, las 60.000 personas que irán a vivir al nuevo barrio contribuirán de modo importante a saturar la M-30, la M-40 y el centro de la capital.

El consejero de Urbanismo, Luis Eduardo Cortés, y el concejal Del Río llegaron a un acuerdo en este tema el pasado sábado, según señaló hoy el edil. Los propietarios del PAU de Vallecas deberán correr con la financiación de los 2.000 millones.

"Si ustedes me lo permiten", explicó Igacio del Río, "vamos a intentar hacer una Castellana con la capacidad de la M-30 y una M-30 que se parezca más a la Castellana, un poco simplificando los términos, es decir, que no sea algo realmente duro, muy impactante en Vallecas y, al mismo tiempo, que permita una capacidad de viario muy alta".

Técnicamente, se trata de encontrar "una solución de vía deprimida (bajo el nivel del suelo), con amplias zonas verdes laterales, con pasos entre las zonas", según el concejal.

CAMINO LIBRE PARA LOS PAUS Con este acuerdo queda libre el camino para que ambas administraciones, ayuntamiento y comunidad, firmen el convenio de los nuevos barrios de Madrid, cinco PAUs con un total de 65.712 viviendas; mientras que la CAM tiene 'luz verde' municipal para construir la autovía regional M-45.

El convenio de los cinco nuevos barrios ya sólo depende de la firma de Alvarez del Manzano y Ruiz-Gallardón, previsiblemente en este mes de noviembre, según Del Río.

Además del PAU de Vallecas, se trata del Ensance de Carabanchel, con 10.000 viviendas, en el suroeste; de Montecarmelo, con otras 10.000 viviendas, en el noroeste, y Las Tablas, con 9.700, y Sanchinarro, con 13.000 pisos, ambos en el noreste.