Según Francisco Pérez, portavoz de la Asociación de Vecinos Puente de Vallecas, estas obras están causando graves molestias en peatones y conductores con retenciones que ayer alanzaron varios kilómetros en un tramo transitado diariamente por unos 230.000 vehículos.

Francisco Pérez subrayó especialmente el "impacto medioambiental que supondrá la ampliación de carriles de la M-30", puesto que, según ellos, "acercará aún más una autovía de circunvalación a las viviendas del entorno".

Asimismo, estas obras agudizan la escisión urbanística entre Vallecas y el resto de la ciudad y aumenta la incomunicación del barrio de Peña Prieta y Doña Carlota con más de 15.000 habitantes,privado ya de acceso directo por automóvil debido al estrechamiento de la acera que precisan las obras, dijo.

Los vecinos de Puente Vallecas piden la paralización de la obra hasta que el MOPU y el Ayuntamiento de Madrid estudien, con los vecinos, las posibles alternativas a la ampliación del puente y en su defecto, medidas que aminoren el impacto ambiental como la instalación de pantallas acústicas y la revitalización del espacio urbano situado bajo el puente.