Este es uno de los resultados incluidos en un estudio realizado por la Fundación para la Investigación, Estudio y Desarrollo de la Salud Pública, presentado hoy, para el cual fueron encuestadas mil mujeres profesionales de la medicina (600 enfermeras y 400 médicas).

Del estudio se deduce que en los últimos 6 años ha descendido el porcentaje de enfermeras y doctoras que fuman, al pasar del 34,71%de fumadoras en 1998 al 33,75% en 2003 -en el caso de las médicas- y del 47,62% al 40,33% en el de las enfermeras. Aun así, en el caso de las médicas ha aumentado en 2,69 puntos el porcentaje de fumadoras si se comparan los datos de 2003 (33,75%) con los de 1995 (31,6%).

Si se analizan los datos por grupos de edad, se observa que las enfermeras fuman más entre los 30 y 40 años (45,16%), mientras que entre las doctoras hay más fumadoras a partir de los 40 años (44,27%).

El estudio analiza otros asectos relacionados con el tabaquismo, como los intentos realizados para dejar el tabaco, los motivos que han llevado a las ex fumadoras a dejar este hábito o las principales circunstancias en las que aconsejan a los pacientes no fumar.

Los responsables de la Fundación para la Investigación, Estudio y Desarrollo de la Salud Pública recordaron en la presentación del estudio que el tabaquismo es la primera causa aislada de mortalidad y morbilidad en cáncer de pulmón y enfermedades cardiovasculares y es rsponsable de unas 50.000 muertes al año en España, e insistieron en que los profesionales de la salud juegan un papel especialmente relevante en la prevención, ya sea dando ejemplo o como educadores.

Igualmente, destacaron que, al igual que ocurre entre la población general, en las profesiones relacionadas con la salud se está produciendo un aumento del hábito entre las mujeres y una disminución entre los hombres.