López Amor y González ofrecieron estas explicaciones, en una rueda de prensa en el Congreso de os Diputados, tras la información publicada hoy por el diario "El Mundo" sobre la participación del primero en una inmobiliaria y del segundo en una empresa de seguridad privada.

Esta información, subrayó López Amor, no ha "destapado" nada, pues los mismos parlamentarios presentaron un escrito en el que se comunicaba al Congreso la realización de estas actividades, a la que la Comisión del Estatuto del Diputado dió su visto bueno por unanimidad, sin que ningún partido hiciera constar su voto en contra

Por ello, recalcó que no entiende el empeño de algunos grupos parlamentarios de presentar esta cuestión como "novedad", cuando, aseguró, se ha "cumplido la legalidad" y en ningún momento se ha actuado "de tapadillo" o "a escondidas".

Explicó que los diputados no están sometidos a la legislación sobre incompatibilidades de altos cargos, sino a la Ley Electoral y el Reglamento del Congreso. A su juicio, los argumentos empleados ahora por la oposición en contra de que ejerzan estas actividades equiale a decir que un médico no puede estar en la Comisión de Sanidad o un abogado en la de Justicia.

CONCEPCION TALIBAN

Esta actitud, agregó, supone una "concepción talibán de la vida parlamentaria", pues la empresa en cuyo Consejo de Administración iba a entrar no tiene ninguna relación ni contrato con la Administración Pública.

No obstante, apuntó que, para que no haya "sombra de duda", ha decidido "de motu propio" dejar de ser miembro de este Consejo de Administración, a fin de "evitar especulciones". Insistió en el cumplimiento de la legalidad, y dijo que la decisión era "ética", porque "la ley puede ser buena, mala o regular, pero nunca puede ser antiética".

Por su parte, Francisco Antonio González se mostró "sorprendido y extrañado" por esta polémica, y anunció su decisión también voluntaria de abandonar el Consejo Asesor de la empresa de seguridad.

SIN PRESION DEL PP

Asimismo, aseguró que "en ningún momento el partido ni el grupo nos han hecho ningún tipo de requerimiento" para ue abandonaran las empresas. "No ha habido ningún tipo de presión en algo en lo que no podía haberla", pues era "perfectamente legal", reiteró.

Subrayó que la decisión de abandonar obedece a dos motivos, "dejar absolutamente clara" su posición "en defensa de lo público", y que, ante la "duda, es mucho mejor" renunciar.

Deploró que se cuestione la "honorabilidad" de dos parlamentarios que, aseguró, no confunden "lo privado con lo público", y confió en que se produzca una disculpa de quienes han heho manifestaciones que excedían lo correcto.