Así lo aseguró Lobato en una entrevista con Servimedia, donde reclamó a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, mayor “dinamismo” en la construcción de vivienda pública.

Explicó que “es imposible compararnos con ninguna ciudad europea” en materia de vivienda porque Madrid sólo tiene “un 1%” de vivienda pública construida, mientras que en otras regiones tienen el 20%.

Lobato planteó en la Asamblea madrileña que, mientras la Comunidad construye las 25.000 viviendas que anunció Ayuso, “dar 300 euros” a esos jóvenes y familias para que se descuenten el alquiler “hasta que seamos capaces de construir esas viviendas”.

“Ya verás como espabilamos y construimos cuanto antes las viviendas, para que empiecen a pagar el alquiler asequible y dejemos de tener que pagarles los 300 euros. Esto se puede hacer mañana”, defendió para añadir que, de este modo, se exige a los políticos y al Gobierno "ponernos las pilas”.

PISOS TURÍTICOS

Respecto a los pisos turísticos, Lobato defendió que “el Gobierno ha dado un paso al frente muy importante”, en relación al anuncio que realizó el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, de plantear un registro estatal y reformar la Ley de Propiedad Horizontal, y animó a Ayuso a “coger el testigo”.

Según el dirigente, los pisos turísticos generan dos problemas. El primero “de convivencia”, destacó, porque “ya estamos viendo lo que está pasando en el centro, que es un distrito afectado”, y añadió que “no tiene nada que ver la convivencia de un bloque de pisos residencial, al que le introducen una actividad distinta que en términos de convivencia genera problemática”.

En segundo lugar, el precio de la vivienda. “Si estás expulsando posibilidades de alquileres en sistema residencial normal, pues se reduce la oferta y, por lo tanto, suben los precios. Esto es de primero de economía", dijo Lobato.

Los socialistas plantearon en las últimas elecciones que no se pueda conceder ninguna licencia de vivienda turística en ninguno de los distritos, calificados por la Ley del Suelo, como zonas tensionadas.

Lobato consideró que es “imposible” que la Comunidad de Madrid tenga “menos de diez” inspectores para vigilar que se cumpla la normativa y también señaló que “no sabemos los pisos turísticos que hay” porque “cada vez que pedimos la cifra nos dan una cosa distinta y te metes en cualquier plataforma y ves el listado y hay diez veces más”.

TURISMOFOBIA

El dirigente consideró “preocupante” esa aversión al turismo que se está viviendo en algunos puntos de España este verano, como en Cataluña. “Viví en Cataluña unos años y hay determinadas zonas donde se ha dado peso a un turismo muy agresivo que, en términos de convivencia y vida social, genera mucho desgaste”, dijo.

Aseguró que “esta reacción puede llegar a Madrid” y recomendó crear “un modelo más agradable para los vecinos” porque “la gente quiere ir a la ciudad a visitar la ciudad, no un parque de atracciones”.

Indicó que, al final, el modelo “se nos volverá en contra” porque Madrid “perderá valor como destino turístico y, además, en términos de convivencia, los vecinos van a acabar como lo que estamos viendo en otros sitios”, zanjó.