Lluch, que salía así al paso de las críticas suscitadas por la publicación en el periódico "La Vanguardia" de un artículo suyo en el que defendía al escritor José Luis de Vilallonga por asegurar que existe en España una "confabulación contra el Rey", calificó de "insólito que monárquicos exaltn a un republicano como Manuel Azaña y no a personas como Maura".

El ex ministro de Sanidad, que en su artículo de opinión afirma que "el triunfo de Berlusconi ha dado alas a quienes desde los medios de comunicación y desde las finanzas desean gobernar", dijo no entender que se pretende con "este republicanismo que normalmente coincide con posiciones muy de derechas".

"El republicanismo es básicamente de derechas, lo que no es sorprendente porque Falange Española era antimonárquica, con algunos aadidos de izquierdas", señaló Ernest Lluch, quien pidió que si lo que estos sectores pretenden es un cambio de la Constitución, "que lo digan en serio, porque si no es agitar los espíritus sin llevar a ninguna parte".

Para el rector de la UIMP, "la Constitución de 1978 tiene que tener una gran virtud, y es que dure, porque la estabilidad es necesaria. El problema urgente en España no es si tenemos monarquía o república y se está jugando con ambigüedades", añadió.

Lluch acusó a algunos órganos de xpresión de haber cambiado de actitud y de fomentar esta polémica. "Que algunos que han sido toda la vida monárquicos sean ahora partidarios de Azaña, que ha sido una de las personas más republicanas de la vida de España, es sorprendente".

"Yo no hablo de confabulación, hablo de opiniones expresadas en órganos 'contra natura', porque la confusión en la vida pública es mala", aseguró Lluch, para quien esta situación puede ser calificada como una "alianza impía, que es cuando la gente para ir en contra e algo se alía con fuerzas diversas".