Según informó Justicia, Llop hizo esta reflexión en la entrega de despachos a la promoción de abogados del Estado de 2023. También impuso las condecoraciones de la Orden de San Raimundo de Peñafort a miembros de la Abogacía del Estado que han sido distinguidos por sus actuaciones.

En su intervención, la ministra se refirió a que en el mundo jurídico no se puede renunciar a las nuevas tecnologías, incluida la inteligencia artificial, “porque sería renunciar a nuestro propio futuro”.

Sin embargo, alertó sobre el peligro de “abusar en el uso de la inteligencia artificial”, especialmente “con fines ilícitos”. Del mismo modo, advirtió sobre los “sesgos” que tienen estas tecnologías: “Debemos evitar que sustituyan una habilidad que es patrimonio de la humanidad, que es diferenciar el bien del mal”.

“COHESIÓN TERRITORIAL Y SOCIAL”

Al mismo tiempo, Llop se refirió a que la Administración de Justicia y la Abogacía del Estado se enfrentan a tres retos: la digitalización, los nuevos campos de regulación y la “cohesión social y territorial”.

Asimismo, mostró su convencimiento en que “el Estado estará bien defendido, representado y asesorado” por los nuevos miembros de la Abogacía del Estado, lo que “es sin duda una de las garantías capitales del Estado de derecho”. Igualmente, destacó el “elevado sentido del deber y excelencia” de los galardonados en el acto de hoy.

Al acto de este lunes acudieron también el secretario de Estado de Justicia en funciones, Tontxu Rodríguez, y la abogada general del Estado y directora del servicio jurídico del Estado, Consuelo Castro.