En su intervención de apertura de la primera reunión del Consejo Político Federal tras las elecciones del 9 de marzo, a la que asistieron 131 dirigentes, Llamazares reconoció que "hemos sufrido una severa derrota desde el punto de vista del resultado electoral y político".

"La derrota política no se debe solamente a condiciones externas, hemos cometido errores y tenemos insuficiencias", asumió el líder de IU, por lo que habrá que acometer cambios en las cuestiones como la política de alianzas, el modelo organizativo, o la dirección colectiva.

Insistió en la influencia de la Ley Electoral en la situación a la que ha llegado IU, que ha perdido un 20 por ciento de los votos y casi un 60 por ciento de la representación parlamentaria, lo que se une al "bipartidismo y la política del miedo".

Se trata, recalcó, de una "situación grave, sin paliativos", por lo que hay que reconocer la situación "de urgencia que vive la organización" y crear organismos unitarios que permitan afrontar el proceso asambleario y "mantener la legitimidad de nuestra asamblea federal para gestionar la coyuntura política".

La próxima Asamblea Federal, que la dirección propone celebrar los días 15 y 16 de noviembre, debe ser "de recomposición interna, de unidad, para actualizar la línea política y convocar un proceso constituyente en la izquierda, recomponernos desde el punto de vista político y abrirnos desde el punto de vista social".

Llamazares justificó la decisión de constituir un grupo parlamentario junto a ERC, tal y como aprobó sin votos en contra la Presidencia, órgano ejecutivo de dirección, en la necesidad de "mantener la viabilidad de la organización a través de la viabilidad económica, política y técnica". Aseguró que IU está en una situación de "austeridad, pero no de penuria".

NUEVA ETAPA

Por otro lado, en materia política, dijo que IU ha adaptado su línea a la nueva legislatura, en la que el PSOE "gira hacia el centro derecha, tanto en la configuración del Gobierno, en la que la política económica neoliberal subordina a la ambiental y social", como en cuanto a las medidas frente a la crisis.

Denunció que se pretenda suprimir el Impuesto de Patrimonio, con lo que se continúa con la "desfiscalización de las rentas", y se tomen medidas que sólo harán "recaer la crisis sobre la gran mayoría de los ciudadanos y los trabajadores", con lo que no sólo son "ineficaces, sino contraproducentes".

Con todo, Llamazares indicó que para llegar a la Asamblea con las máximas aportaciones se abrirán foros con la sociedad y con los movimientos sociales, para "preguntarnos y respondernos en la izquierda política y social sobre lo que nos ocurre y lo que tenemos que cambiar", y poder "reconstituir un proyecto político en una nueva etapa".