Llamazares anunció esta propuesta mediante un comunicado, después de que Jaime Mayor Oreja planteara "un escenario catastrofista" sobre las consecuencias que un avance de los partidos de izquierda tendría en la cohesión de España.

En su opinión, se trata de un "fundamentalismo" que responde a la tesis "o el PP o el caos", y que consiste en "repartir a diestro y siniestro acusaciones de que todos ls demás son sospechosos de ser unos peligrosos nacionalistas".

Frente a ello, considera Llamazares, "las fuerzas de izquierdas deben dar una respuesta conjunta a la regresión autonómica que plantea el PP, que lleva aparejada una menor autonomía política y financiera".