En caso contrario, advirtió, quedará en evidencia "la hipocresía política" de los socialistas en su modo de abordar la legislación sobre la interrupción del embarazo.

El candidato de IU a la Presidencia del Gobierno hizo estas declaraciones la víspera de que se celebre en Madrid y en distintas ciudades españolas una concentración "Por el derecho a decidir de las mujeres", enmarcada dentro de la campaña de autoinculpación organizada por distintas asociaciones feministas.

Para Llamazares, "no es de recibo, y así lo van a entender las mujeres y colectivos afectados, que el PSOE acuda y apoye las concentraciones que van a tener lugar mañana y, a la hora de la verdad, no haga nada".

"En un tema tan importante como éste, que afecta a decenas de miles de mujeres y sus familias en nuestro país, no se puede estar en misa y repicando y el PSOE lo debería saber", continúa Llamazares.

El máximo responsable de IU ha denunciado la "campaña de acoso y derribo ahora recrudecida" que sufren desde hace semanas varias decenas de mujeres que han interrumpido legalmente su embarazo, así como las clínicas que practican "con profesionalidad" la interrupción voluntaria de la gestación de acuerdo a la ley.

El candidato a la Presidencia del Gobierno por IUresponsabilizó del origen de estos ataques a "grupos ultraconservadores que cuentan con el apoyo institucional de la derecha del PP y de muy específicos miembros de la Judicatura".

"El cerebro de esta operación", asegura IU, "está en la Comunidad de Madrid", donde está sucediendo "algo parecido a lo que ocurrió con la impresentable campaña del caso de las sedaciones en el Hospital Severo Ochoa de Leganés hace año y medio".

"Desde IU", finalizó Llamazares, "defendemos la sanidad pública y el derecho de las mujeres a decidir", por lo que abogó por "despenalizar el aborto, sacándolo del Código Penal" y por la elaboración de una "nueva y moderna ley de plazos" como la presentada por Izquierda Unida en el Congreso durante la legislatura recién concluida y que no pudo debatirse "por el veto coordinado impuesto por el PSOE y el PP".