En una rueda de prensa en la sede de la coalición, Llamazares reiteró que, cuando el decreto del Gobierno con el que consagra el acuerdo con la Iglesia sobre enseñanza religiosa adquiera rango de ley, lo recurrirá ante el Tribunal Constitucional, ya que considera que vulnera el principio de aconfesionalidad.

"Los acuerdos con la Iglesia se sitúan más en el postfranquismo, los acuerdos entre el Vaticano y el Estado, que en la lógica aconfesional de la Constitución, por lo que son recurribles ante el Tribunal Constitucional", agregó.

Insistió en que estos acuerdos otorgan a la Iglesia católica un "privilegio" inaceptable en el terreno financiero y de la enseñanza pública, por lo que son "contradictorios con la aconfesionalidad del Estado".

Finalmente, subrayó que las decisiones del Gobierno socialista respecto al tratamiento a la Iglesia "no tienen nada que ver con la opción progresista que debería situar a cada uno en su lugar: el poder civil y la jerarquía eclesiástica, y tampoco facilita la no beligerancia".