A la salida de la reunión, su rival, Manuel Fernández "Lito", aseguró que es mejor que la Ejecutiva de UGT "se calle" porque sus "presiones" dificultan la configuración de un consenso democrático sobre el sucesor de Redondo.

Por su parte, Méndez dijo en rueda de prensa que antes del 15 de marzo se alcanzará una candidaura de consenso "en la que no tengo por qué estar yo", ya que "tenemos vocación de buscar lineas de consenso y entendimiento".

Aseguró que intentará buscar un acuerdo con "Lito" y abogó por que las votaciones sean "uno por uno, delegado por delegado", así como por la creación de un órgano consultivo que actúe como foro de discusión sobre el relevo generacional en UGT.

Asimismo, defendió un sindicalismo de servicios y por negociar "con el Gobierno y la patronal, y mantener conversaciones y relacioes fluidas, sin entrar en una estrategia de confrontación".

Ese tono conciliador no le impidió criticar la reforma del mercado laboral y puso como ejemplo de los resultados a los que puede conducir la actual crisis de Santana Motor.

RENOVACION HISTORICA

Para Méndez, el próximo Congreso de UGT debe acometer una renovación "histórica", dadas las circunstancias económicas que atraviesa tanto España como el propio sindicato, aquejado sobre todo por la crisis de la PSV.

Apostó porque la nueva Eecutiva de UGT sea un equipo de dirección colegiado "pero siempre equilibrado" y se mostró convencido de contar con el apoyo de quienes tienen "un mayor peso político", aunque aclaró que no entrará en una dinámica electoral.

Por su parte, el secretario general de la Federación de la Construcción, Manuel Garnacho, expresó su apoyo a "Lito", quien en la tarde de hoy martes iba a comer con Méndez, para intentar llegar a un compromiso.