La caída afectó a todas las obras públicas: un 58,8 por ciento en vivienda, un 71,2 por cien en equipamientos sociales (colegios, hospitales e instalaciones deportivas), un 15,8 por cien en carreteras y un 31,2 por cien en obras hidráulicas, entre otras.

La licitación disminuyóprácticamente lo mismos en las tres administraciones públicas, con una reducción del 47,5 por cien en la Central, un 46,7 en las comunidades autónomas, y un 47,4 en la local.

El Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), que es el principal contratista público de obras, licitó construcciones por un importe total de 63.472 millones de pesetas, un 62,8 por cien menos que los 170.846 millones del mismo periodo del 91.

Por comunidades, todas disminuyeron sus licitaciones, salvo Extremadura, qe las incrementó un 60 por cien. Las regresiones más importantes se dieron en Cantabria, del 87 por cien; La Rioja, del 84 por cien; y Navarra, del 80 por cien.

En su comentario a estos datos, la patronal Seopan, que agrupa a las grandes empresas del sector, asegura que "la continuidad de la actividad constructora está en peligro" y recuerda que la producción del sector disminuyó un 3,3 por cien en el primer trimestre, según datos del Instituto Nacional de Estadística.

A su juicio, "ni el sector on sus empresas y trabajadores, ni la economía nacional, pueden permitirse esto". El desarrollo de España, añade Seopan, exige la mejora y aumento de sus infraestructuras.