Según Gurruchaga, "la libertad recobrada del señor Iglesias supone el final de una larga e inhumana tortura a la que la banda mafiosa ETA le ha sometido".

Agregó que esta "magnífica noticia" se ve únicamente empañada po el hecho de que, a pesar de todos los esfuerzos realizados por los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, "los terroristas responsables del secuestro continúan todavía en libertad".

El gobernador civil aseguró que las fuerzas de seguridad trabajaban en distintas líneas de investigación, ya que "no sabíamos exactamente dónde estaba y teníamos bastantes pistas que nos llevaban a direcciones contrarias".

"Nosotros no teníamos ningún triunfalismo en relación a la posibilidad de liberar a Julio Ilesias y de detener a sus secuestradores, por tanto éramos cautos. Los datos que tenemos no nos pueden llevar a ninguna consideración acerca del lugar exacto donde estaba secuestrado", dijo Gurruchaga.

Agradeció la colaboración ciudadana y se mostró convencido de que continuará en el futuro, "hasta abrir definitivamente el camino de la paz y la libertad para el País Vasco".

Gurruchaga no quiso desvelar si las fuerzas de seguridad continúan rastreando la zona donde se buscaba a los secuestradores e Julio Iglesias, pero dijo que la Guardia Civil continúa trabajando para intentar acabar con la lacra que supone la permanencia de ETA en el País Vasco y en el resto de España.