Los socialistas respondieron a ese indulto con la presentación de cuatro preguntas que otros tantos portavoces del Grupo Socialista formularon esta tarde, una tras otra, al ministro de Justicia, Angel Acebes.

Juan Fernando López Aguilar, María Teresa Fernández de la Vega, Julio Villarrubia y Diego López Garrido defendieron todos y cada uno de los argumentos esgrimidos por los socialistas en contra de este indulto.

El cruce comenzó con López Aguilar, quien acusó al Gobierno de "revocar" unasentencia del Tribunal Supremo, a lo que el ministro replicó defendiendo la legalidad y la constitucionalidad de todos los indultos otorgados.

El ministro apelaba continuamente a las cuatro horas de comparecencia celebrada por la mañana en la Comisión de Justicia e Interior, mientras la presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, llamaba al orden y pedía una y otra vez a "sus señorías" que permitieran la continuidad de la sesión.

"PAPELON"

Sin que ninguno de los dos flancos del hemiciclo abanonaran los abucheos recíprocos, María Teresa Fernández de la Vega lamentó ante Acebes "el papelón" al que se ha visto sometido debido a las "deudas de su Gobierno".

Tan sólo unos minutos después, Julio Villarrubia preguntó al ministro si comparte la opinión expresada por el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Eduardo Fungairiño, sobre la inocencia de Gómez de Liaño.

En la formulación de la última de las preguntas, Diego López Garrido expresó su convencimiento de que este indulto es "el productofinal de una conspiración que se montó en su momento en una guerra mediática que ustedes impulsaron, donde implicaron a la Fiscalía, y que hoy tienen que pagar. Por eso no lo pueden explicar".

"Siguen sin abandonar viejos fantasmas del pasado que les siguen atando permanentemente en sus discursos y en sus obsesiones", respondió Acebes, que echó mano de situaciones pretéritas para rebatir el aluvión de críticas.

"A un ex ministro se le dio una nueva oportunidad y hoy está trabajando en su función ública, y eso se lo pretenden negar, y también se ha indultado a gente de su propio partido, pero la ofuscación o las ataduras a otros intereses particulares les está impidiendo tener la generosidad que la sociedad española ha demostrado en muchas ocasiones", concluyó Acebes.