En rueda de prensa en el Congreso, la secretaria de Educación del PP, Sandra Moneo, y el portavoz parlamentario de este área, Juan Carlos Guerra Zunzunegui, criticaron con dureza la propuesta socialista, aunque se felicitaron de que el principal partido de la oposición "entre en contenidos por primera vez, reconozca que hay problemas en el sistema educativo y abandone las descalificaiones absurdas".

El PP calificó de "regresivas", "difusas" y "poco realistas" las promesas socialistas, pero hoy puso el acento en las consecuencias económicas que tendría su entrada en vigor.

Destacó que mientras la Ley de Calidad "no supondrá grandes sumas" de dinero por la contratación de más profesorado de lengua extranjera o por la implantación de los itinerarios, del espíritu de la oferta del PSOE sí se desprende una "subida de impuestos".

Respecto a los permisos y reducción de jornadapara los padres de hijos con fracaso escolar, los populares creen que sería achacar a las familias una responsabilidad que corresponde a la escuela. "Es una propuesta absolutamente irreflexiva", dijo Moneo.

En cuanto al incremento de horas para lectura y otras áreas, el PP reprocha a los socialistas que no concreten qué materias piensan sacrificar o si piensan aumentar el conjunto de la carga lectiva.

Pese a estas críticas, el PP dice que está abierto al diálogo y ve posible un entendimiento con os socialistas en las medidas que se asemejan a las del documento de bases de la ley, como la diversificación curricular o la ampliación de la oferta de plazas de Educación Infantil.