Según un portavoz de estas asociaciones, el símbolo quiere "identificar a todas las personas que condenamos el secuestro y exigimos la liberación de Julio Iglesias Zamora" y que sea "exprsión de firmeza democrática ante los que intentan imponernos su dictadura del terror".

Los colectivos pacifistas insistieron en que los únicos medios válidos para resolver los conflictos y reclamar los derechos son los democráticos y pacíficos.

Aseguraron que, en este momento Julio Iglesias "está secuestrado por quienes temen la mayoría de edad de los ciudadanos vascos que nos quieren imponer su injusticia manifiesta por la fuerza del terror, y para los cuales, la vida de Julio es sólo un instrumnto de trueque, cambiar a Julio por dinero".

Asimismo, afirmaron que, para la gran mayoría de la sociedad vasca, "Julio es uno más de nosotros que está cautivo de esos pequeños dictadores que nos quieren imponer su chantaje y su temor a la libertad".

Desde el conjunto de las organizaciones pacifistas hicieron un llamamiento a los ciudadanos vascos para que demuestren diariamente "que somos lo suficientemente adultos para decidir qué queremos y cómo lo queremos lograr" y que luzcan la cinta de colr azul como elemento de libertad para el directivo secuestrado.