Este galardón, instituido con carácter anual para distinguir a personalidades destacadas en el ámbito de la creación artística o científica, cuya obra presente una dimensión humanística capaz de evocar, en nuestros días, la de Menéndez y Pelayo.

Los finalistas de este año han sido propuestos, tal comoestablecen las bases de la convocatoria, por diversas instituciones culturales españolas y de los países latinoamericanos.

La dotación económica del Premio se ha incrementado notablemente este año, al pasar de los cinco millones de pesetas que solían entregarse al ganador en anteriores ediciones a los ocho millones, que son aportados, como siempre, por Eulalio Ferrer, presidente de la Academia Cervantina de México.

En anteriores convocatorias, el Premio Menéndez y Pelayo recayó en Octavio Paz (197), Emilio García Gómez (1988), Julio Caro Baroja (1989), Martí de Riquer (1990), Pedro Laín Entralgo (1991), Carlos Fuentes (1992) y José Manuel Blecua (1993).