La segunda semana del juicio que se celebra en la Audiencia Nacional por el secuestro, torturas y asesinats de Lasa y Zabala comenzó con la declaración ante el fiscal de Enrique Dorado, que negó haber participado en los hechos de los que se le acusa.

Dorado completó la coartada de las dos personas acusadas como autores materiales de los hechos, Bayo y él mismo, después de que el ex capitán Angel Vaquero, también imputado, declarara que había visto en Oñate a Dorado pero que no recordaba haber visto al otro guardia civil.

El ex sargento aseguró que el 15 de octubre de 1983 acudió al lugar del atentadode Oñate en el coche con Felipe Bayo. Allí recibió instrucciones de Vaquero, mientras que Bayo quedaba rezagado, por lo que justificó que el ex capitán no recordara haberle visto.

Según la versión de Dorado, pasaron allí toda la noche, hasta que amaneció, realizando las diligencias necesarias, aunque dijo que no figura en el atestado porque esa noche había mucha gente investigando el atentado.

Dorado aseguró que no se enteró de la desaparición de Lasa y Zabala hasta que no se lo dijo un compañero ya que aseguró que él no lee la prensa "abertzale" (la información fue publicada por "Egin").

Agregó que "jamás" ha estado en el Palacio de la Cumbre, por lo que negó haber interrogado allí a Lasa y Zabala. Respecto a la declaración de Bayo en este sentido, indicó que no la pactó con él y que cuando se enteró por los medios de comunicación de lo que había dicho su compañero, le comentó que era una "barbaridad", puesto que no es cierto.

Asimismo, el ex sargento de la Guardia Civil declaró que nuna realizó labores de información en el sur de Francia y que, aunque se saltó la norma y pasó al país vecino varias veces, siempre lo hizo por cuestiones particulares. Dorado dijo también que "mis superiores jamás me han ordenado nada ilegal y jamás lo hubiera hecho".

Respecto a las cintas que se escucharon el pasado viernes, en las que supuestamente Bayo, Dorado y Vaquero conversaban acerca de estos hechos, indicó que no reconoce su voz y que su abogado ha impugnado las cintas.

Cuando le tocó el urno de preguntas al abogado de la acusación particular, Iñigo Iruín, Dorado se negó a contestar a una persona a la que aseguró haber oído gritos de "ETA mátalos".

"Respeto mucho a las personas a las que usted representa. No sé si usted actualmente pertenece o ha pertenecido a HB o EH, pero de lo que sí doy fe es de que, por mi trabajo, he asistido a manifestaciones ilegales en las que había Fuerzas de Seguridad para darles protección a los ciudadanos y sí le he visto a usted gritar 'ETA mátalos', y EA mataba", declaró.

Añadió que "ETA mataba a guardias civiles, ETA mataba a niños, mataba a mujeres, y yo no puedo contestar a una persona que ha hecho estos gritos delante de mí".

Ante estas palabras, que Iruín calificó de "falsedad evidente", el abogado dijo que la instrucción del caso había estado llena de actos de amedrantamiento e incluso de agresión física hacia él por parte de uno de los acusados. Dicho esto, comenzó su interrogatorio.

Dorado se negó también a contestar a la acusaciónpopular, que mañana continuará su interrogatorio después de escuchar unas cintas.