La reducción afectó especialmente a la licitación de viviendas, que cayó un 38,3 por cinto, pero alcanzó también a la de transportes (-30,8 por cien), urbanización (-18,4) y obra civil (-24,4).

Sólo se salvó de esta tendencia la licitación de equipamientos sociales, que creció un 20,5 por cien, gracias a un aumento del 28 por cien en la de instalaciones deportivas y del 42,2 en la de colegios.

Además, la evolución ha sido muy dispar por comunidades autónomas, ya que se registraron aumentos de la licitación oficial en Cantabria (163,8 por cien), Comunidad Valenciana (79,7), Navarra 39), Canarias (23,7) y Madrid (2,9).

Los mayores descensos se produjeron en Extremadura (-73,3 por cien), Castilla La Mancha (60,8), Murcia (-56,2), Andalucía (-50,2) y Asturias (-47,3). También disminuyó en Castilla y León (42,8), Baleares (-23,9), La Rioja (-24,4), Cataluña (-23,4), Galicia (-22,6), Aragón (-11,9) y País Vasco (-1,2).

Por otra parte, los datos de Seopan indican que las viviendas iniciadas en los siete primeros meses de 1991, periodo para el que se dispone de información, disminyeron un 12,6 por cien. La caída responde al fuerte descenso, del 13,4 por ciento, en la construcción de viviendas privadas, puesto que las públicas crecieron un 14,4.

Seopan prevé que la desaceleración de la actividad en el sector de la construcción proseguirá en 1992, ya que la reducción de la inversión en infraestructuras por parte de la Administración Central no se verá compensada con la realizada por autonomías y corporaciones locales.

A su juicio, 1992 será un año "mediocre" para la actividd constructora y "francamente malo" para varias regiones españolas. Eso se reflejará también en el volumen de empleo del sector y en la marcha del conjunto de la economía, por la función de "locomotora" que juega la construción.