LADY DI SIGUE ENCERRADA EN UNA MASION DE BENAHAVIS (MALAGA), MIENTRAS SUS HIJOS FRECUENTAN LAS PLAYAS DE MARBELLA
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Las vacacines que la princesa Diana de Inglaterra pasa en el pequeño municipio malagueño de Benahavís continúan siendo la mera estancia en una mansión de lujo propiedad de un multimillonario amigo de la familia real británica, mientras que los hijos de Lady "Di" y Carlos frecuentan la playa, asediados por paparazzis.
Lady Di, que llegó el sábado en jet privado a Málaga, sólo se ha dejado ver en un restaurante de Benahavís. El resto del tiempo lo pasa dándose chapuzones en la piscina de la mansión "Tramorres", jgando al tenis y tomando el sol en los jardines casi inexpugnables para los objetivos fotográficos
Mientras tanto, numerosos periodistas españoles y británicos siguen haciendo guardia en las cercanías de la mansión, donde la Guardia Civil impide el paso a cualquier persona extraña, al tiempo que agentes especialmente desplazados desde el Reino Unido velan por la seguridad de Diana y sus hijos Guillermo y Eduardo.
Hasta tal punto es difícil acercarse hasta la residencia, que ayer por la tarde peridistas británicos decidieron alquilar un helicóptero con el que sobrevolar la finca, con el único objetivo de tomar unas imágenes de la que se supone placenteras vacaciones reales. Si bien, según comentan los "paparazzis", el ruido del motor alertó a Lady Di, que prefirió ponerse a cubierto.
Pero si Lady Di no parece estar dispuesta a dejarse ver en público, sus hijos, Eduardo y Guillermo disfrutan de las playas de Marbella y de las motos acuáticas de alquiler, que usan a modo de trampolín.
Los pcíficos ciudadanos españoles y extranjeros que tomaban el sol en la playa de Bora-Bora se han visto sorprendidos por la presencia del heredero a la Corona británica, discretamente protegido por los servicios de seguridad y ansiosamente fotografiados por los "paparazzis".
Cada vez que los hijos de Lady Di salen de la finca, una caravana de vehículos de fotógrafos siguen sus pasos, mientras que el resto de informadores gráficos continúan la guardia frente a la casa, llegándose incluso a apostar en un mote cercano, que es frecuentemente "peinado" por la Guardia Civil, no se sabe muy bien si para impedir la toma de fotografías o para velar por la seguridad de la todavía mujer de Carlos de Inglaterra.
Otras de las incógnitas que aún se desconocen es cuando dará por concluida sus vacaciones la princesa Diana, que podría aguardar a que lleguen hasta "Tramorres" unas amigas británicas, con las que compartió días de descanso en Semana Santa en Mijas.
(SERVIMEDIA)
26 Jul 1994
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