Entre lo robado está una agenda telefónica de una secretaria judical en la que figuran los teléfonos privados de varios jueces, fiscales e incluso de algún alto cargo del Gobierno.

Los robos comenzaron el pasado 17 de marzo y las víctimas han sido varios fiscales, dos secretarias judiciales y una funcionaria de dicho organismo.

A una de las víctimas le desapareció una cartera con varias tarjetas de crédito que trataron de utilizar en un cajero del Barclays Bank y a otra una billetera con más de 100.000 pesetas. Los fiscales también han sido afectados y uno de elos no podrá volver a utilizar la magnífica pluma Montblanc con la que habitualmente trabajaba.

En la Audiencia Nacional se respira bastante malestar, ya que, según las mismas fuentes, el ladrón podría robar también documentos judiciales, sacarlos y devolverlos sin que nadie se de cuenta, así como colocar micrófonos en lugares estratégicos o incluso algún artefacto explosivo.

Por esta razón, los responsables policiales de la Audiencia Nacional han dictado nuevas normas de seguridad que están vigetes desde ayer. Así, a la Fiscalía de esta institución no se puede entrar directamente, sino que hay esperar en una salita hasta obtener permiso.