El decreto que prepara el Departamento de Sanidad establece una serie de requisitos para posibilitar que estos ciudadanos tengan cementerios propios.

Los camposantos destinados a otras comnidades religiosas que no sean la católica podrán construirse "siempre y cuando no haya ninguna afección para la salud pública ni para el medio ambiente", sgún explica Luis González de Galdeano, director de Salud Pública vasca.

En la actualidad, los ciudadanos musulmanes que viven en el País Vasco se ven obligados a trasladar a sus muertos a sus paises de origen, ya que tanto la normativa estatal como la vasca impiden que éstos sean tratados según sus costumbres religiosas.

Según Galdeano, "no ha que olvidar que sus ritos exigen unas normas concretas de lavado del cadáver, de féretros sin cruces o de enterramientos que son radicalmente distintos a los cristianos".