En declaraciones a Antena 3, Solana declaró: "En estas circunstancias, una intervención terrestre contra la voluntad de Milosevic podría tner un alto coste en vidas humanas, por lo que los países implicados en este conflicto tienen que estar sólidamente seguros de lo que hacen".

Añadió que "lo que se trata de conseguir es que Molosevic ceda y se pueda efectuar un despliegue sobre el terreno que garantice la vuelta de los refugiados", e insistió en que "hay que actuar con tenacidad y perseverancia, y tener en cuenta las limitaciones para evitar daños, que nadie quiere que se produzcan".

Asimismo, subrayó que "Milosevic está muy debiitado y va a durar poco" e indicó que el presidente yugoslavo no puede seguir en el puesto que ocupa, porque "los ciudadanos de Serbia tendrán que retirarle de su cargo y el Tribunal Penal Internacional también tendrá que actuar según sus responsabilidades".