En declaraciones a Servimedia, el ex dirigente de EA achacó también la derrota a la "indefinición" de la formación y dijo que ahora toca un período de reflexión interna y responsabilidad para conseguir salir de una situación, que calificó de "muy complicada".

EA tomó la decisión de concurrir a las elecciones por separado en el momento "menos indicado", según Knörr. "Si ir sólo le iba a perjudicar cómo partido, ir sólo en un escenario sin los votos de Batasuna es suicida", sentenció.

Recordó que la decisión de concurrir por separado la tomó la Asamblea de EA, que no la Dirección de la formación que fue partidaria de ir con el PNV, y con eso se ha hecho el "haraquiri político", concluyó.

Además, Knörr cargó contra el PSOE y el PP que, según dijo, desde 2003, con la Ley de Partidos, diseñaron un escenario electoral "antidemocrático", para conseguir que el PP y el PSE fueran mayoritarios en Euskadi.

"Querían un resultado electoral amputado, y esa es la estrategia que han seguido, y que el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el Estado Mayor del PSOE han llevado a cabo", afirmó

El mapa político de Euskadi, aseguró Knörr, "no ha cambiado tanto", desde 2005. Según explicó, si se contabilizan los escaños de los votantes de Batasuna que han acudido a votar y han votado nulo, la formación ilegalizada habría obtenido siete escaños, y la suma del PP y el PSE sería de 34 escaños, "no llegaría a la mayoría".

Con estas mimbres, señaló, "seguiría siendo mayoritario el bloque autodeterminista, en el que está EA".

Finalmente, pronosticó un panorama "muy complicado" para su formación. Falta paz interna: "somos pocos y mal avenidos", dijo, y las consecuencias de "hacer política contra el PNV y no construir un camino propio, ahora se van a pagar".