En un auto hecho público hoy, la Audiencia Nacional considera acreditado que Sarasola "percibió de los administradores del Grupo Torras SA" dos remesas de 27,4 y 1,1 millones de dólares USA en junio de 1988 y en octubre de 1990, respectivamente.

"Tales prestacions carecen de contraprestación por parte de Enrique Sarasola, esto es, que aparentemente se trata de un enriquecimiento sin causa", señala el auto, en contra de lo que sostiene Teresa Palacios.

Según la investigación de Palacios, el financiero obtuvo en 1990 una comisón de 27,4 millones de dólares (unos 3.300 millones de pesetas de entonces), por su participación en la operación de las Torres KIO, ubicadas en Madrid.

Además, la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional considera que Enrique Sarasoa "es partícipe a título lucrativo de un delito de apropiación indebida [...] supuestamente cometido por los administradores del Grupo Torras", razón por la que le impone la fianza de 28.500.000 dólares de hace diez años, es decir, unos 3.300 millones de pesetas.

La juez Teresa Palacios investiga la desaparación de varios miles de millones procedentes de empresas kuwaitíes ubicadas en España y de las que Javier de la Rosa era el máximo responsable en nuestro país.