Con esta decisión, anunciada a apenas una hora del debate en el Congreso, el Gobierno está más cerca de superar la enmienda a la totalidad de Vox –la única que queda pendiente– y evitar una nueva derrota parlamentaria.

Si Junts no hubiese cambiado su posición, la continuidad del proyecto de ley hubiera dependido del sentido del voto del PP, que ayer amagaba con apoyar tanto la enmienda a la totalidad de los independentistas como la de Vox para finalizar el recorrido parlamentario del proyecto de ley.

En una declaración ante los medios sin preguntas, Eduard Pujol, diputado de Junts, afirmó que este paso se debe a que se ha acordado introducir un nuevo concepto que bautizó como “enmienda Cataluña”.

En su alocución, Pujol se limitó a explicar que “blinda las competencias” de Cataluña avanzó que será una “cláusula” que se tendrá que aplicar en todas las leyes que lleguen a la Cámara Baja para contar el apoyo de su partido.

Tras un “proceso negociador intenso”, Junts considera que “se ha mirado por Cataluña”, lo que les obliga a retirar su enmienda a la totalidad. No obstante, rechazó todas las preguntas de los periodistas y rehusó entrar en el fondo del acuerdo con los socialistas, por lo que se desconoce en qué sentido irán las enmiendas pactadas.