Como principal novedad, el borrador de la ley prevé un único plan de carácter cuatrienal que sustituirá a los dos que hasta ahora se han venido aplicando separadamente para la investigación (PAI) y para el desarrollo tecnológico y la innovación (Pladit).

Este nuevo plan, denominado PAIDI, integrará las políticas autonómicas en ambos campos y ya está siendo elaborado con la participación de todas las áreas del Gobierno andaluz y de los agentes económicos y sociales.

Al igual que el PAIDI, la futura ley parte de la consideración del conocimiento como un bien común público y se plantea como principales objetivos alcanzar la máxima rentabilidad social en el uso de los recursos de ciencia y tecnología, facilitar la transferencia de resultados a la sociedad y facilitar la máxima conexión con las empresas y el sistema productivo.

Para ello, el texto recoge cuatro grandes bloques de medidas, destinados a orientar la investigación y la innovación hacia la ciudadanía; instituir el conocimiento como el motor de transformación de la economía; armonizar el Sistema Andaluz del Conocimiento con otros contextos estatales y europeos, y finalmente, establecer los órganos responsables de las políticas de I+D+I.