El fiscal general del Estado lleva una semana estudiando las declaraciones de Damborenea para comprobar si violan algún precepto legal. Este período de tiempo es considerado "excesivamente dilatado" por diversos miembros del Gobierno y del Partido Socialista que se han mostrado disgustados por lo que interpretan como "escasa diligencia" de Carlos Granados

El propio ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, le envio un escrito en el que, de acuerdo con el Estatuto orgánico de la Fiscalía, le instaba a que estudiara el asunto.

Al mismo tiempo, los servicios jurídicos del Estado están también analizando las implicaciones legales de las revelaciones de Damborenea y esperan tener las conclusiones de su trabajo para traladarlas a la Fiscalía o para emprende alguna acción legal por su cuenta.