Ibarra respondió así a una pregunta formulada por el portavoz de Izquierda Unida en Extremadura, Manuel Cañada, que acusó a la Junta de llevar a cabo una política "meramente electoralista" con las expropiaciones.

El presidente extremeño recordó que los tribunales han dado la razón al Gobierno regional en su labor expropiatoria, excepto en el caso de la finca "El Valero", aunque indicó que todavía existen contenciosos abiertos con respecto al justiprecio, como el de las incas "Cabra Alta" y "Cabra Baja", propiedad de la Casa de Alba.

Ibarra dijo que la Junta de Extremadura "no expropió por expropiar", sino como medida disuasoria para evitar la existencia de fincas no productivas, y aseguró que actualmente las fincas extremeñas se encuentran excelentemente cultivadas.

El jefe del Ejecutivo extremeño concluyó que cuando el Partido Socialista llegó al Gobierno de la región el 90% de las fincas estaban hipotecadas y existía una gran deuda en el campo que ya ha desaprecido. "Además, el PIB de la agricultura extremeña ha subido este año un 40%", subrayó.