Durante la segunda sesión del cuarto juicio que se celebra contra Juan Guerra y dos responsables del SAS, Sánchez Barriga aseguró que después de 10 meses de gestiones por parte de Litomed con resultados negativos, decidieron acudir a otras instancias para conseguir el acuerdo con el SAS.

Sánchez Barriga indicó que el consejo de administración estimó correco contactar con cualquier persona que estuviera capacitada para desbloquear la situación y subrayó que la mediación de Juan Guerra aceleró el proceso del acuerdo.

La primera tarifa del tratamiento de litotricia fijada por Litomed fue de 385.000 pesetas, frente a las 210.000 establecidas por la sanidad pública.

En este sentido, Sánchez Barriga reconoció que la propuesta de la clínica era un negocio para Litomed, aunque planteó que este tratamiento era necesario para cubrir una laguna en el servici de la sanidad pública.

El consejero delegado de Litomed insistió en que desconoce si parte del dinero obtenido por la clínica fue destinado a pagar algún tipo de comisión.