Casi dos décadas después de su muerte, el juez había citado a declarar a Xavier J.M. como sospechoso del asesinato de la bibliotecaria Helena Jubany. La cita será el próximo día 20 de abril, tras la reapertura del caso en agosto de 2020 y después de haber recibido un informe de la policía científica que certifica que su caligrafía es la misma que la de dos cartas anónimas halladas en la vivienda de la mujer.

Comparecerá ante el juez como imputado en esta causa que no había podido ser resuelta. Jubany fue hallada muerta sin ropa y con decenas de quemaduras por todo el cuerpo en un patio interior el 2 de diciembre de 2001. Bibliotecaria de 27 años y residente en Sabadell (Barcelona), recibió dos notas anónimas. La primera el 17 de septiembre de 2001 y la segunda el 9 de octubre.

Tras faltar al trabajo y a citas concertadas en días diferentes con su padre y una amiga, su familia informó a la Policía. Su cuerpo apareció días después en un patio interior. El informe forense descartó el suicidio. En su cuerpo se encontraron grandes cantidades de un somnífero, lo que hizo pensar que fue arrojada al vació mientras estaba inconsciente.

Eran notas redactadas con la familiaridad de quien es conocido. Pero no iban firmadas por nadie. La segunda llegó acompañada de un zumo que se bebió, quedando atontada. Tanto que tuvo que quedarse a dormir en casa de unos amigos porque fue incapaz de volverse a su casa. Mandó analizar el zumo y acabó descubriendo que contenía un potente somnífero.

Esa segunda nota hacía referencia a las salidas en grupo de la Unión de Excursionistas de Sabadell. En aquel entonces y con ese hilo conductor, se investigó como sospechosos a un grupo de cinco personas entre las que estaba Xavier, pero en ese momento sólo se cotejó la letra de las notas con la de las mujeres del grupo. Su caligrafía era en parte coincidente con la de las notas y entraron en prisión provisional.

En 2005 una de ellas salió de prisión y la otra se suicidó asegurando que era inocente, pero los investigadores siempre pensaron que tenía información. El caso quedó archivado. Ahora, varios mensajes del sospechoso rescatados del disco duro del ordenador de Helena y su letra, van a poner a Xavier ante el juez.