Del Olmo entiende que el Departamento de Cultura del Gobierno vasco sería parte afectada porque fue el órgano que concedió subvenciones de 9 millones de euros a las empresas del entramado montado en torno a la editorial "Egunkaria", mientras que la Diputación Foral de Guipúzcoa sería la principal perjudicada de que las sociedades de ese grupo no hubiesen declarado ante su Hacienda Foral fondos de origen dudoso, según informaron fuents jurídicas.

Según fuentes de la investigación, las nueve sociedades mercantiles relacionadas con el entramado de "Egunkaria" habrían recibido subvenciones por valor de nueve millones de euros y habrían ocultado sus beneficios para obtener esas ayudas por parte del Gobierno vasco.

Este entramado habría sobredimensionado la capacidad de sus empresas y, en alguna ocasión, habría llegado a declarar ventas de más de 220.000 periódicos en algunas zonas del País Vasco, cuando en realidad la tirada no legaba a 90.000.

El juez Del Olmo clausuró "Egunkaria" el pasado 20 de febrero por su supuesta vinculación con ETA. El magistrado sostiene que las empresas de este entramado desviaban parte de sus ingresos hacia la banda terrorista. Antes de ser intervenida por la Audiencia Nacional, "Egunkaria" editaba el diario en euskera "Euskaldunon Egunkaria" y otras publicaciones periódicas, además de libros.