Los hechos ocurrieron el pasado 22 de junio cuando, según Olarra, el militar, junto a otrs tres personas, fueron sorprendidos manipulando su coche y perseguidos por algunos miembros de la coalición abertzale.

Tres de ellos consiguieron darse a la fuga, mientras que el militar fue primeramente reducido por Olarra y, tras huir de éste, entró en la comisaría de la Ertzaintza del barrio de Amara, de San Sebastián.

El acusado declaró en su día que se vió obligado a refugiarse en la comisaría de la Policía Vasca ante la agresión de algunas personas, entre las que se encontraba Olarra, que e reconocieron como militar.

El abogado de la acusación particular del "caso Olarra", Iñigo Iruín, así como el ministerio fiscal, mostraron hoy al titular del juzgado número 2 de San Sebastián, que instruye el caso, su interés por conocer la identidad del acusado que, durante todas las diligencias practicadas ha sido identificado con un número, a lo que el juez se negó.

Ante la negativa del juez a la identificación de dicha persona, la acusación particular se negó a formular preguntas al acusado.Por ello, Iruín pidió al titular del juzgado de instrucción número dos de San Sebastián una comunicación formal en la que le informe a él, como acusación particular, y al ministerio fiscal de los motivos de la negativa, para interponer contra dicha decisión los resursos correspondientes.

El abogado de la acusación particular se negó, además, a formular preguntas al acusado hasta que reciba del CESID la respuesta a un oficio enviado por el juzgado para recabar datos sobre esta persona, según aseguró elpropio Iruín.

A juicio del abogado, el ocultamiento de la identidad del militar es "improcedente, puesto que no hay ninguna norma procesal que la ampare, ni en la Ley de Enjuiciamiento Criminal, ni en ninguna otra norma especial".

Iruin afirmó que el acusado se ratificó en la declaración que ya hizo en su día ante el juez y la Ertzaintza, y no facilitó ningún detalle más de la comparecencia del capitán de Caballería por estar decretado el secreto del sumario.

Asimismo, el letrado anunció quela acusación particular demandará nuevas diligencias "para tratar de corregir la anómala instrucción realizada por la Ertzaintza el pasado 22 y 23 de junio, que ya está contaminando el precedimiento y está produciendo dificultades añadidas al conocimiento real de lo que aconteció".

Por su parte, el portavoz de HB, Floren Aoiz, que junto a otros miembros de la Mesa Nacional de la coalición abertzale se concentraron en la puerta de la Audiencia Provincial con una pancarta con el lema "CESID: Estado terrrista", se mostró convencido de que la actuación del militar tenía por objetivo "la preparación de un atentado terrorista para acabar con la vida de Olarra".

Añadió que "la guerra sucia no acaba con el GAL" y que, para acabar con ella, hace falta "que este tipo de investigaciones llegue hasta el final". Además, culpó al Ministerio de Defensa, al PNV y a la Ertzaintza de mantener "silencios cómplices" y de tener "responsabilidades políticas" al "entorpecer" la investigación y "cooperar con la guerra suia".