En declaraciones a Servimedia, Lucas dijo que "el problema no es entre Salamanca y Barcelona o entre Castilla y León y Cataluña, sino la falta de sentido de Estado de un Gobierno débil que toma una decisión equivocada e inoportuna a falta de 60 días para unas elecciones".

Lucas recordó que la posición de su Ejecutivo en este asunto es de total rechazo al traslado de estos fondos, "porque va en contra de la voluntad popular" y porque "es nuestra obligación defender la integridad de nuestro patrmonio".

Por otro lado, el jefe del Ejecutivo de Castilla y León dijo que está seguro de que el PP ganará los próximos comicios del 28 de mayo, en los que obtendrá, según dijo, "los mejores resultados de su historia".

En su opinión, el triunfo del PP en las elecciones del 28-M "hará reflexionar a quienes se empeñan en mantener a un Gobierno de la nación que ha perdido la confianza de la mayoría de los españoles. A mi juicio se van a convertir en primarias".

Lucas calificó de positiva su gestin al frente del Gobierno castellano-leonés en esta última legislatura y destacó como uno de sus logros haber conseguido que el PIB de la comunidad subiera por encima de la media nacional en un período de fuerte regresión.

Finalmente, apostó por que ninguna empresa se vaya de Castilla y León por falta de apoyo. "Eso sí, se exigirá inversión real en un proyecto viable y la generación de empleo que tenga el proyecto antes de dar una peseta la Junta", afirmó.