"Si se levanta el embargo de armas lo que habrá será ás combates, habrá más guerras, no paz, habrá más víctimas", señaló el embajador en declaraciones a Onda Cero.

Yáñez afirmó que el levantamiento del embargo supondría "retirar toda o buena parte de la ayuda internacional porque no se podría estar realizando en condiciones mínimas de seguridad. Por todas esas razones la mayoría del Consejo, y entre ellos España, era de la opinión de que no era la medida más adecuada".

"Naciones Unidas no ha arrojado la toalla en la antigua Yugoslavia y creo que nodebería nunca arrojarla, incluso si en algunos momentos - puede ocurrir - tengamos que recurrir a medios todavía más enérgicos, y eso todavía no está excluido", señaló el embajador de España ante la ONU.

De todas formas Yáñez no descartó una solución pacífica, porque "para la negociación, para el diálogo, para buscar una salida pacífica, siempre hay que dejar una puerta abierta, nunca hay que perder la esperanza".

Respecto al ataque norteamericano a Irak el diplomático español explicó la postura e España que, según el embajador, "manifestó una cierta comprensión, aunque no llegáramos al extremo de apoyarlo plenamente".

"Ningún país llegó a censurar o criticar abiertamente la acción emprendida por los Estados Unidos", afirmó Yáñez, y dijo que los americanos "al menos han tenido el gesto de que han venido a Naciones Unidas a informar de lo que han hecho y a explicar las razones que le han impulsado a hacerlo".

El embajador alabó la actitud norteamericana en el Consejo de Seguridad, donde "ubo un debate público" y "no se escondió nada, y cada país tuvo ocasión de pronunciarse al respecto".