Rodríguez criticó el hecho de que "se haya tenido que llegar a la muerte de un joyero para que la mala situación del sector haya cobrado más importancia", dijo en relación con el asesinato ayer de un joyero de Móstoles.

Esta llegada de bandas extranjeras se debe a que en la actualidad "no existe una buena respuesta legal" que condene este tipo de actos delictivos, por lo que los grupos que se dedican al robo "prefieren actuar en España antes que en otros países como Francia", añadió Rodríguez.

Desde el gremio de joyeros ven la legislación española "muy tolerante" con los delincuentes, hasta el punto de desfavorecer a los propios dueños de las tiendas, y explicó que la gran mayoría de los ladrones arrestados son puestos en libertad condicional y vuelven a delinquir.

De este modo, Rodríguez confirmó que el acoso a las tiendas del gremio es un problema que se ha incrementado últimamente, y puntualizó que durante los últimos siete años tuvieron lugar cerca de 120 atracos en joyerías de Madrid.