En declaraciones a Servimedia, Alcaraz resaltó que la situación del Ejecutivo italiano tras la dimisión de su ministro de Exteriores, Renato Ruggiero, que ha alterado el calendario de la Presidencia europea, es una "venganza de Berlusconi por la posibilidad de que se abra paso la orden de busca y captura europea y otras políticas que están planteadas y le afectarían personalmente".

Para el portavoz de IU, esta actitud del presidente del obierno italiano demuestra su "postura de ultraderecha", con una situación "que se parece mucho a la de Austria, aunque un poco más difuminada", tal y como pone de manifiesto el hecho de que Italia "no va a tener ministro de Asuntos Exteriores durante los próximos seis meses".

"Ante esta situación el Gobierno español se calla, porque Berlusoni es un aliado personal de José María Aznar", denunció. "Piqué viene a decir, además, como en la época de Franco se decía que el problema no era él, sino sus caudllos, que el responsable no es Berlusconi, sino la gente que le rodea", agregó.

En su opinión, el Ejecutivo español trata de "justificar una posición de ultraderecha, contra la posibilidad de ir más allá de la moneda única, en materia de justicia, de delitos económicos y corrupción", algo que no es admisible en un Gobierno que preside la UE.

Alcaraz recordó a Aznar que "tiene una responsabilidad doble, como amigo personal de Berlusconi y como presidente de la UE. No vale echar balones fuera, tien que tomar posición, responder a la iniciativa europeista que está surgiendo de los sectores progresistas de Italia y no tapar las vergüenzas e intentar ocultar el gravísimo problema que está planteando Berlusconi".