Anguita, que testificó en su propio despacho a petición de la propia jueza, mostró en posterior rueda de prensa su escepticismo sobre la posibilidad de averiguar la identidad de los autores de la intervención teléfonica.

"Hay ciertas instituciones que tienen quizá mayor facilidad. Pero no quiero entrar en l campo de la conjetura porque no tengo pruebas. Prefiero no hablar: lo que sí digo es que por este camino que vamos es un asquito", declaró.

Según un informe técnico elaborado por una compañía privada de seguridad a instancias de IU, la intervención telefónica se realizó desde el exterior de la sede de Izquierda Unida, ya que no se ha encontrado material en el interior del edificio.

La declaración judicial prestada hoy por Anguita es consecuencia de la denuncia que el dirigente comunista present semanas atrás, después de detectar varias interferencias cuando mantenía una conversación con el director del diario "El Mundo", Pedro J. Ramírez.

Según declararon ese mismo día los afectados, ambos escucharon por el auricular durante varios minutos el ruido del rebobinado de una cinta magnetofónica. Tras cortarse la comunicación, Anguita descolgó de nuevo el teléfono y pudo oir repetida la conversación que acababa de mantener con el periodista.

La Mesa del Congreso admitirá mañana a trámite unapetición de Izquierda Unida para que comparezca en la Cámara el fiscal general del Estado, Eligio Hernández, a fin de informar sobre el problema de las escuchas telefónicas en España, informaron hoy a Servimedia fuentes de la Mesa.

El órgano de dirección del Congreso denegó la pasada semana una petición del portavoz de IU, José Luis Núñez, para que el fiscal del Estado informara exclusivamente de la intervención del teléfono de Julio Anguita.

La mayoría de la Mesa estimó que no es costumbre que e fiscal del Estado acuda al Congreso para informar sobre cuestiones concretas que planteen los grupos parlamentarios.