Anticipó que presentará, durante la tramitación de la Ley del Suelo, algunas propuestas para "impedir que los promotores privados acaparen y retengan suelo, al tiempo que permitan que las administraciones públicas dispongan de suelo suficiente para la construcción de vivienda protegida".

Afirmó que la reforma de la Ley del Suelo que persigueAguirre tiene entre sus objetivos "sentar las bases para la depredación del territorio madrileño en los próximos diez años yeliminar algunas instancias de control para que los promotores puedan aumentar sus brutales ganancias en menos tiempo".

Indicó que en la Comunidad de Madrid actualmente se encuentra urbanizado el 17 por ciento del territorio y hay un porcentaje similar todavía no urbanizado, mientras que el 66 por ciento restante es territorio protegido.

Aseguró que "lo que quieren con esta nueva ley es devorar cuanto antes lo que está pendiente de urbanización y acelerar el asalto a zonas protegidas de alto valor medioambiental, como muestran algunos proyectos impulsados por el PP en la sierra norte".

En cuanto a las modificaciones administrativas, Fernández aseguró que "lo que buscan es rebajar los controles y desregular más, para darle oportunidades a la iniciativa privada de hacer más negocios en menos tiempo".

Fernández pidió a Esperanza Aguirre que rectifique el modelo urbanístico de la Comunidad, con un planeamiento que garantice la sostenibilidad en el medio y largo plazo.

"No somos partidarios de congelar a los municipios tal como están ahora, pero sí de que se gradúe su crecimiento y que haya un reparto social de los beneficios de los nuevos desarrollos a través de la ejecución de vivienda protegida", puntualizó.

Fernández hizo estas declaraciones en Galapagar, donde, junto a miembros del grupo municipal de IU, denunció el daño medioambiental que podría afectar en la zona por la construcción de la variante de la carretera M-510 a través de una fresneda, como contempla el proyecto impulsado por el PP.