Según esta federación de partidos, los conciertos realizados por la Junta de Andalucía con empresas privadas de sanidad han superado entre los años 1984-91 más de 94.000 millones de pesetas, es decir, el mismo presupuesto anual con que cuenta el Servicio Andaluz de Salud.

La proliferación de este tipo de conciertos perjudican notoriamente, según IUCA, la política de atención primaria, así como la apertura de los cetros de salud.

De acuerdo con el modelo sanitario de la Junta de andalucía, los centros de salud sustituyen, funcional y asistencialmente a los consultorios y ambulatorios, siendo su función principal la prevención y el asesoramiento.

El parlamentario autonómico de IUCA, Rafael Rodríguez, estima que sólo un 50 por ciento de los centros de salud cuya construcción fue prevista en 1984 han abierto sus puertas, a pesar de que las obras de muchos de ellos están concluidas.

Asimismo, esta formació política asegura que en muchos casos el carácter multidisciplinar de los centros de salud no llega a cumplirse, debido a la carencia de personal técnico no sanitario, como los asistentes sociales, profesionales éstos considerados "fundamentales para la elaboración de estudios sanitarios de la población".

IUCA entiende que el incremento en el número de conciertos con la sanidad privada se enmarca de una "futura privatización de la sanidad, partiendo para ello desde una sanidad mixta".