Para Isabelo Herreros, secretario de Derecos Humanos de IU, "gran parte de la culpa de que estén en libertad la tienen esos viles indultos de Menem, garantes de la impunidad, por los que cabe calificarle de cómplice de asesinos y torturadores".

Herreros considera que las acusaciones contra Garzón son una injerencia intolerable en la Justicia española y reprochó los modos y la mala educación de Menem y de su ministro de Interior, Carlos Corach, al decir que si Garzón fuera juez en Argentina "lo echarían a patadas del país".

Para Herreros,estas palabras "son lamentables y demuestran que Argentina es un país donde no existe independencia del poder judicial respecto del poder político, y el Gobierno está acostumbrado a poner y a quitar jueces a dedo".