López afirmó que, a diferencia de lo que ocurre en otros países europeos, en España el trabajo a tiempo parcial "no es una opción voluntaria, sino un recurso impuesto al no encontrar una ocupación a tiempo completo".

Recordó también que este tipo de contratos suponen una merma considerable en los derechos sociales, son precarios en un 90%son un "gueto" para las mujeres trabajadoras, las principales destinatarias de las mismas.

"Los datos demuestran que al menos el 75% de los contratos a tiempo parcial tienen nombre de mujer, y sus salarios no superan el 45% de lo que cobran los hombres", dijo la representante de IU.

Además, criticó el anuncio hecho por el Gobierno de que se vaya a incrementar la protección social de estos contratos, "cuando eso mismo ya fue pactado con los sindicatos en la reforma laboral y se dió un plazo de trs meses para hacerlo, que se ha incumplido totalmente".