Así de contundentes se expresaron hoy a Servimedia fuentes jurídicas y judiciales, que sólo explican la absolución en base al temor de los magistrados por el ambiente de violencia que vive el País Vasco.

Iraultza (Revolución en euskera) fue condenado por el juez de menores a tres meses de internamiento en un centro cerrado o a prestar servicios en favor de la comunidad durante 36 horas, sanción que la Audiencia Donostiarra ha revocado ahora.

La mismas fuentes explicaron que una sanción como la impuesta por el juez de menores depende de la valoración de las pruebas y ésta da resultados totalmente divergentes, debido a las "poco normales" condiciones que vive el País Vasco, donde todo se politiza.

Siempre según estas fuentes, los razonamientos "exclusivamente políticos" que contiene el fallo de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de San Sebastian, y que sirven para desechar las pruebas, están "sacados de contexto".

La convulsió que vive Euskadi hace factible que una prueba quede "coja". Esto sólo cambiará cuando se acabe el ambiente social de miedo y terror que se respira.

Agregaron que las medidas necesarias para normalizar la convivencia en el Páis Vasco y evitar sentencias tan dispares como las del `caso Iraultza' van más alla de las estrictamente policiales.

Para las mismas fuentes consultadas por Servimedia, este sentimiento de inseguridad total sólo puede cambiarse cuando los responsables políticos reconozcan quelo que ocurre en el País Vasco no es normal y se enfrenten al problema con las ideas claras. Agregaron que, si no se admite esta situación es porque se tiene miedo a una "situación prebélica".