Rodríguez Zapatero leyó una declaración en la sede del PSOE después de que varios atentados el pasado fin de semana provocaran decenas de muertos en Iraq y tras las "evidencias" de que ese país no tenía armas de destrucción masiva. Su existencia fue "un falso e intolerable pretexto" para qu Estados Unidos y sus aliados iniciaran una guerra al margen de la legalidad internacional, sentenció.

Subrayó el líder socialista que el caos no ha disminuido, sino que ha aumentado tras la captura de Sadam Husein, porque todo es consecuencia de las mentiras defendidas por los defensores de esa guerra, entre los que citó a José María Aznar y a Mariano Rajoy, en su calidad de presidente y vicepresidente del Gobierno, respectivamente, en el momento en el que se inició la intervención militar en Iraq. "Señor Rajoy, en democracia los gobernantes dan cuenta a los ciudadanos de sus decisiones. Usted decidió que España apoyara una guerra inmoral, injusta e ilegal, que está teniendo consecuencias desastrosas para el pueblo iraquí y para la seguridad del mundo, que está generando más terrorismo, más incertidumbre y más caos", afirmó Rodríguez Zapatero.

El líder socialista recordó varias intervenciones públicas en las que Rajoy juzgó como hecho objetivo la existencia de esas armas y le acusó abiertamene de haber despreciado el rechazo moral que el apoyo a la guerra suscitaba en la mayoría de los ciudadanos españoles.

Recordó a Rajoy que los gobiernos estadounidense y británico reconocen que pudo haber errores en la información sobre las armas de Iraq, por lo que el Gobierno español no puede seguir mirando hacia otro lado y negándose a asumir responsabilidades.

"Ese no es el talante, ni la actitud ni el compromiso de alguien que aspira a asumir la Presidencia del Gobierno. En política, cuando s quieren asumir las responsabilidades más altas del país, hay que responder de lo que se ha dicho y de lo que se ha hecho, y más cuando eso supone apoyar una guerra", advirtió Zapatero a Rajoy.

A la vista de la situación en Iraq, el líder socialista considera que los defensores de la guerra deben dar "un paso atrás" y poner todo su potencial político y militar al servicio de la ONU "para que todo esto sirva como una gran lección de que no se pueden hacer guerras ilegales, con mentiras, engañando a la pinión pública, que originan la pérdida de miles de vidas humanas y que aumentan el terrorismo".

"Quienes han hecho estas guerras, las han promovido y las han apoyado tienen una clarísima responsabilidad ante la que deben profundas explicaciones a la ciudadanía, y yo se las voy a exigir cada día", concluyó.